Este martes 25 de marzo, la selección peruana tendrá una chance única de avanzar en la lucha por el repechaje hacia el Mundial de 2026. El reciente tropiezo de Venezuela en Quito, donde cayó 2-1 ante Ecuador, abrió una puerta inesperada para los peruanos.
Con este resultado, la clasificación en las Eliminatorias Sudamericanas se ha vuelto aún más ajustada, transformando el enfrentamiento en Maturín en una verdadera final anticipada. Actualmente, Venezuela ocupa la octava posición con 12 puntos, mientras que Perú está noveno con 10 unidades. Una victoria permitiría a los peruanos superar a los venezolanos y acercarse peligrosamente al séptimo lugar, el cual otorga acceso al repechaje intercontinental.
Venezuela bajo presión tras la derrota ante Ecuador
La derrota de Venezuela en Quito dejó al descubierto varias debilidades en el equipo dirigido por Fernando Batista. A pesar de haber mostrado mejorías en meses anteriores, los fallos defensivos y la incapacidad para mantener ventajas en partidos clave han generado dudas sobre su capacidad para pelear por un cupo en el Mundial. Este revés no solo aleja a Venezuela de la zona de repechaje, sino que también incrementa la presión sobre el plantel antes del crucial duelo contra Perú. Un nuevo traspié en Maturín podría dejar a la Vinotinto en una situación crítica, ampliando la distancia con sus rivales directos en la tabla de posiciones.
Perú llega con confianza tras resultados recientes
Por su parte, Perú entra al partido con la moral alta gracias a una serie de actuaciones positivas que le han permitido mantenerse en la pelea. Aunque aún no logra consolidarse entre los seis primeros, una victoria en Maturín podría marcar un punto de inflexión en su campaña. Las estadísticas históricas favorecen a los peruanos en enfrentamientos recientes contra Venezuela, lo que añade una dosis extra de confianza al equipo dirigido por Óscar Ibáñez. Además, la Blanquirroja ha demostrado ser competitiva en situaciones de alta presión, un factor que podría inclinar la balanza a su favor en este compromiso.
La carrera por el repechaje: cada punto cuenta
A falta de solo cinco jornadas para el final de las Eliminatorias, el partido entre Venezuela y Perú adquiere una relevancia trascendental. El séptimo puesto no solo es un objetivo simbólico, sino que representa la posibilidad de disputar un repechaje intercontinental por un lugar en el Mundial 2026. Con Bolivia actualmente en esa posición con 13 puntos, seguida de Venezuela con 12 y Perú con 10, cada unidad se vuelve vital en esta recta final. Un triunfo en Maturín no solo permitiría a Perú superar a Venezuela, sino que también lo colocaría a solo dos puntos del ansiado séptimo lugar, manteniendo vivas las esperanzas de clasificación mientras se prepara para los últimos compromisos del torneo.