La selección chilena inició una nueva etapa con un triunfo clave al superar 2-0 a Rusia en un amistoso internacional disputado en el Olimpiyskiy Stadium de Sochi. Este resultado marcó el debut oficial de Nicolás Córdova como entrenador, un momento relevante para una plantilla renovada que busca recuperar competitividad. Con goles de Gonzalo Tapia y Ben Brereton, Chile quebró una extensa racha invicta rusa y consolidó un inicio prometedor en esta nueva era futbolística.
Chile rompe la racha invicta de Rusia y debuta con victoria bajo Nicolás Córdova
La selección chilena venció 2-0 a Rusia en un duelo amistoso cargado de intensidad y exigencia táctica. El encuentro, disputado a orillas del Mar Negro, permitió evaluar el desempeño del equipo en un contexto internacional exigente. A pesar de un rendimiento ofensivo irregular, la escuadra chilena capitalizó errores defensivos del rival y mantuvo firmeza en su bloque posterior.
El primer gol llegó al minuto 36, cuando Gonzalo Tapia aprovechó una falla del central Igor Divéyev para definir con precisión y abrir el marcador. En el minuto 76, Ben Brereton amplió la ventaja tras otro desajuste defensivo ruso, sentenciando así un partido que exigió orden y eficacia.
Rusia llegaba al encuentro con una sólida racha de 18 partidos sin perder, vigente desde septiembre de 2023. La derrota ante Chile significó el cierre de ese ciclo y evidenció falencias en la salida del balón. Glushakov estuvo cerca de descontar con un potente disparo que chocó en el larguero, mientras que la Roja reclamó un penal no sancionado tras mano de Umiárov.
Brandon Vigouroux, portero del Swansea City, se convirtió en figura al evitar varias opciones claras de los rusos, especialmente en remates de Aleksandr Golovín y Konstantin Tiukavin. Su desempeño fue determinante para sostener el arco en cero y equilibrar un duelo que por momentos se inclinó hacia los locales.
Análisis táctico: una Roja joven, dinámica y con decisiones arriesgadas
El partido también significó el primer examen del modelo táctico de Nicolás Córdova, quien sorprendió con algunas decisiones en la alineación inicial. El entrenador optó por un esquema más móvil y dejó en el banco a Ben Brereton, uno de los referentes ofensivos del equipo, que ingresó en el segundo tiempo para sellar el triunfo.
Este encuentro reflejó el inicio de un proceso de renovación absoluta, caracterizado por la ausencia de jugadores emblemáticos de la “generación dorada”. Chile apostó por un juego dinámico, transiciones rápidas y una defensa disciplinada que respondió adecuadamente ante la presión rusa.
Rusia buscó imponer dominio territorial, pero la falta de precisión en los últimos metros y sus errores en salida condicionaron su desempeño. La presión alta chilena dificultó la circulación del equipo europeo, generando recuperaciones que derivaron en acciones de peligro. Aunque el rendimiento ofensivo de Chile no fue brillante, la eficacia en momentos clave definió el resultado final.
A nivel estructural, la selección chilena enfatizó la solidez defensiva como punto de partida, decisión que permitió compensar la ausencia de figuras de mayor recorrido internacional. Córdova apostó por jóvenes con despliegue físico y capacidad para sostener un ritmo exigente durante los 90 minutos.
Lo que viene para Chile: el clásico del Pacífico ante Perú
Tras la victoria en Sochi, Chile se prepara para enfrentar a Perú en una nueva edición del clásico del Pacífico, encuentro correspondiente a la fecha FIFA de noviembre. El duelo se disputará el martes 18 de noviembre a las 12:00 (hora peruana), en lo que será el último amistoso internacional del año para ambas selecciones.
Perú llega al compromiso después de empatar 1-1 con Rusia, resultado conseguido gracias a un remate de larga distancia de Alex Valera que superó al portero rival. Este contexto anticipa un duelo equilibrado entre dos selecciones que atraviesan procesos de reestructuración y que buscan cerrar el año con una actuación convincente.
Con la victoria ante Rusia y el rendimiento mostrado, Chile afrontará el clásico con impulso anímico y con la posibilidad de consolidar los avances tácticos introducidos por Nicolás Córdova. El partido permitirá evaluar nuevamente la capacidad de adaptación de los jóvenes futbolistas chilenos frente a un rival histórico de la región.

