La reconocida cantante Giuliana Rengifo reveló que fue víctima de una extorsión perpetrada por delincuentes que operan desde una prisión en Piura. Los criminales exigieron S/ 30,000 a cambio de no atentar contra su vida ni la de su familia. Este caso ha generado preocupación en el ámbito artístico y refleja un problema creciente de inseguridad en el país.
Amenazas constantes pusieron en alerta a Giuliana Rengifo
Todo comenzó cuando los delincuentes contactaron a Giuliana mediante mensajes enviados al número telefónico de su representante, pensando que era el de la artista. En estos mensajes, utilizaron tácticas intimidatorias para exigirle una “colaboración voluntaria”. Sin embargo, al no obtener respuesta, intensificaron sus amenazas asegurando que explotarían una granada en su contra y en contra de su familia si no pagaba los S/ 30,000.
“Tengo miedo, estoy aterrada”, expresó Giuliana con voz temblorosa durante una entrevista con el diario Trome. Además, detalló que los extorsionadores afirmaron tener «gente en todos lados» para cumplir sus amenazas. Llegaron incluso a advertirle: “Sería una pena que encuentres muerta a tu hija”.
Ante esta situación, la cantante tomó medidas inmediatas. Denunció el caso en la comisaría más cercana y solicitó garantías para proteger su vida y la de sus seres queridos. También informó que el alcalde de Piura ordenó reforzar la seguridad en la zona donde vive su familia tras reportes de movimientos sospechosos de motocicletas.
Solidaridad con otros artistas afectados
Giuliana no es la única figura pública que ha enfrentado este tipo de amenazas. Recientemente, Bill Orosco, sobrino del reconocido cantante Johnny Orosco, sufrió un atentado con una bomba que estalló frente a su casa en Comas. Al enterarse del caso, Giuliana se solidarizó con él y destacó la necesidad de tomar acciones urgentes contra la delincuencia organizada.
“No podemos seguir viviendo con este miedo constante”, declaró Rengifo mientras hacía un llamado a las autoridades para implementar estrategias efectivas que combatan este flagelo.
Finalmente, la artista subrayó que los criminales intentaron manipularla afirmando que “nadie te va a cuidar las 24 horas” y que la única solución sería pagarles. No obstante, ella decidió enfrentarlos denunciándolos públicamente y pidiendo justicia.
