La región Piura conmemora su aniversario el próximo 15 de agosto en un contexto económico desafiante. A pesar de su potencial, la economía de la región sufrió una caída del 8,6% en el primer trimestre de este año, afectada principalmente por los sectores manufacturero, minero y agropecuario.
“Las cifras de crecimiento nos permiten ver el impulso que está tomando la actividad económica de la región. Crecer nos permite incrementar el número de empleos y, consecuentemente, aumentar el ingreso de las familias en la región. En esa línea, es fundamental garantizar el clima de confianza y estabilidad para sostener este crecimiento en el mediano y largo plazo”, sostuvo César García, economista de REDES.
Sectores en caída: manufactura, minería y agro
Los resultados fueron afectados, principalmente, por el desempeño negativo que registró uno de los sectores claves para la región: la manufactura. Al 2022, este rubro aportaba el 14% de la producción de la economía regional.
Durante el primer trimestre de este año, la manufactura en la región registró una caída de 20,7% ante la falta de disponibilidad de especies marinas en los puertos de Paita, Bayóvar, Talara y Parachique para la elaboración de congelados. De hecho, durante el primer trimestre, el sector pesca –que propicia insumos marinos para la elaboración de la harina y aceite de pescado– bajó en más del 50% por el fin de la segunda temporada de pesca de 2023 en la zona norte y centro.
“Hay que resaltar que, durante el año pasado, el sector pesquero registró en la región constantes caídas como consecuencia de que no se iniciara la primera temporada de pesca por el Fenómeno El Niño. Aunque se trató de un factor climático, ello implica una afectación no solo para los pescadores, sino también para todas aquellas personas que están involucradas en cadenas más grandes de producción, como la elaboración de congelados y enlatados”, explicó el economista.
En tanto, el sector minería –cuyo aporte a la producción regional es de casi el 11%– retrocedió un 3% ante la menor producción de petróleo crudo (-6,9%). Por otro lado, aumentó la extracción de oro (33,8%).
El sector agropecuario, que había mostrado un crecimiento promedio anual del 3,9% entre 2013 y 2022, enfrentó una caída del 34,3% durante el primer trimestre. Esta disminución respondió principalmente a la reducción en la producción de frijol caupí grano seco (-98,7%), uva (-96,2%), mango (-79,7%) y arroz cáscara (-32,3%). No obstante, crecieron los cultivos de arándano (404,2%), caña de azúcar (37,3%) y plátano (13,2%).
“Una de las problemáticas urgentes a atender en la región es la escasez hídrica, que afecta el desarrollo del sector agrario al perjudicar el crecimiento y desarrollo de los cultivos. Por ello, es fundamental planificar una adecuada gestión integral del recurso hídrico en un trabajo articulado entre diferentes entidades”, concluyó el especialista.