La Laguna Ñapique se secó. Donde antes había una gran masa de agua con abundante flora, fauna y visitantes, ahora solo hay arena. Así lo informó a Infopress Juan Carlos Chunga, agente municipal del caserío de Cerritos, en el distrito de Cristo Nos Valga, Sechura. Este problema ha afectado directamente a más de 5.000 personas, entre pescadores, ganaderos, agricultores y operadores turísticos, que dependían de la laguna para su sustento.
Según Chunga, la laguna se comenzó a quedar sin agua debido a que desviaron el agua del río Piura, tapando el flujo de agua a la laguna. A pesar de resistir años de sequías gracias a pequeños ingresos de agua, esta vez no logró recuperarse. El agente municipal comentó a finales del 2024, la Laguna Ñapique se quedó sin agua.
“Los pescadores artesanales han perdido su principal fuente de ingresos. Esta situación ha llevado a muchas familias a emigrar o depender de trabajos temporales para sobrevivir. Además, los ganaderos han perdido ganado por la falta de agua. Los agricultores y apicultores han visto reducida a cero su producción”, dijo.
Asimismo, Chunga comentó que el sector turístico, que anteriormente dinamizaba la economía en temporadas de verano, también quedó paralizado. Principalmente, la población de Cerritos se ve afectada y que son el caserío más cercano a la laguna.
Mesa técnica
La comunidad ha organizado un Frente de Defensa de la Laguna Ñapique, ha iniciado gestiones con el Gobierno Regional de Piura para encontrar soluciones. Se proponen proyectos como la construcción de una represa artesanal y una entrada subterránea de agua para restablecer el flujo hacia la laguna.
“Una mesa técnica está programada para este 28 de enero. Nos vamos a reunir los a representantes del gobierno regional, agricultores, ganaderos y alcaldes locales. El objetivo de la reunión será buscar alternativas concretas para mitigar la crisis y revitalizar este recurso natural vital para nosotros”, indicó.