La sonriente princesa Kako de Japón llegó la noche pasada del 2 de noviembre a nuestro país con la finalidad de realizar una visita oficial, en el marco de la celebración por el aniversario de 150 años de relaciones bilaterales entre Perú y el país del sol naciente. En esta nota de InfoPress te contamos todos los detalles.
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¿Quién es la princesa Kako de Japón?
Kako de Akishino forma parte de la familia imperial japonesa. Tiene 28 años y es sobrina del actual emperador Naruhito. Es la segunda hija del príncipe Fumihito (hermano del emperador) y su esposa Kiko, que es considerada plebeya desde su nacimiento por haber sido criada en un hogar de clase media en Tokio.
Su hermana mayor es Mako de Akishino, conocida actualmente como Mako Komuro luego de perder su título por casarse con un plebeyo. Y su hermano menor, de 17 años, es el príncipe Hisahito de Akishino, segundo en la línea de sucesión para convertirse en emperador de Japón, por detrás de su padre.
Princesa Kako de Japón en Perú
El pasado viernes la princesa Kako celebró en Lima los 150 años de relaciones diplomáticas entre su país y Perú, además demostró su deseo de explorar el «encanto» de la nación andina, en la primera actividad de una visita oficial.
“Estoy encantada de poder conversar con ustedes, nikkei (migrantes japoneses y descendientes), durante mi estancia aquí. También me gustaría conocer mejor el encanto y esplendor de Perú, así como familiarizarme con las actividades en muchos ámbitos”, dijo la princesa Kako en japonés en la ceremonia.
Esta celebración realizada en el local del Centro Cultural Peruano Japonés fue su primera actividad de la visita programa que se extiende hasta el próximo miércoles 8 de noviembre, a la que le sigue un acto en la Cancellería, encuentros con miembros de la comunidad japonesa en Lima y un viaje a Cusco.
Vestida con un kimono, en tonos naranjas y verdes, expresó su «más profundo agradecimiento» por la invitación del Gobierno peruano y a todos los que han hecho posible esta visita.
«Hace 124 años, en 1899, 790 japoneses llegaron a Perú en el (barco) Sakura Maru. Quisiera fijar en mi mente y guardar en mi corazón que los inmigrantes japoneses y sus descendientes superaron muchas dificultades y penas y se han desempeñado con honestidad, diligencia y ayudándose unos a otros, y que han contribuido a la sociedad peruana, ganándose su confianza», indicó.
Recibió agradecimientos y obsequios
Luego de haber terminado su discurso y pronunciar en español «muchas gracias», se acercó a conversar con los asistentes, miembros de la comunidad nikkei, y agradeció personalmente el esfuerzo que realizan cada uno por mantener viva la amistad entre ambos países.
La Asociación Peruano Japonesa le obsequió un chalán de plata, figura tradicional que representa el folclor de la costa peruana.
Decenas de niños de varios colegios de la capital esperaron a su salida a la princesa con banderas peruanas y japonesas, que comparten colores.
