El Ministerio del Interior ha establecido nuevas normativas para los serenos con la finalidad garantizar un uso adecuado y seguro de los implementos de defensa asignados al personal. Con el objetivo de minimizar el riesgo de lesiones durante las intervenciones, estas regulaciones buscan orientar el uso de herramientas como bastones tonfa y gas pimienta. A continuación, te explicamos los detalles más importantes.
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Uso de bastones tonfa: áreas prohibidas e impacto controlado
El uso de bastones tonfa por parte del personal de serenazgo ha sido regulado para que su empleo sea exclusivamente defensivo y excepcional. Según el Decreto Supremo Nº 009-2024-IN, publicado recientemente, el personal de serenazgo solo debe utilizar estos bastones en situaciones donde sea necesario defenderse de una agresión, evitando en todo momento impactar en zonas críticas como la cabeza, el cuello, el tórax y los genitales del agresor.
Estas áreas han sido categorizadas como zonas prohibidas debido al alto riesgo de causar lesiones graves o incluso la muerte. Además, la normativa establece que, de ser inevitable el uso del bastón, se debe restringir su impacto a las zonas con mayor volumen muscular, como los brazos y las piernas, y siempre con la menor fuerza posible.
Zonas incapacitantes y momentáneas: diferencias clave en el uso de fuerza
El decreto también clasifica las zonas del cuerpo en dos categorías adicionales: zonas incapacitantes y zonas momentáneas. Las zonas incapacitantes incluyen áreas donde el impacto puede generar efectos temporales o permanentes, por lo que el uso del bastón en estas zonas debe ser limitado y no reiterativo. Por otro lado, las zonas momentáneas son aquellas donde el impacto puede inmovilizar al individuo por un corto periodo de tiempo, con recuperación total en minutos u horas.
El objetivo es que el personal de serenazgo utilice el bastón tonfa únicamente cuando sea estrictamente necesario, aplicando la fuerza mínima requerida para controlar la situación sin causar daños graves.
Uso de gas pimienta: recomendaciones y restricciones
En cuanto al uso de gas pimienta, la normativa es igualmente estricta. Su uso debe ser exclusivamente defensivo y nunca debe emplearse en espacios cerrados, como el interior de vehículos, debido al riesgo de causar lesiones oculares. Además, el gas pimienta no debe aplicarse a menos de 50 centímetros de distancia para evitar lesiones graves causadas por la dispersión del chorro.
El decreto también subraya la importancia de portar el aerosol de pimienta en una funda con el seguro activado, garantizando que su uso se limite a situaciones de agresión no letal, es decir, cuando el personal de serenazgo enfrenta una amenaza física directa.