La presidenta de la República, Dina Boluarte, rindió un homenaje al Papa Francisco en el Patio de Honor de Palacio de Gobierno. Durante su discurso, expresó su deseo de que la huella imborrable del sumo pontífice guíe a todos los peruanos hacia la unidad y la reconciliación nacional.
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En su alocución, la mandataria destacó que el Papa Francisco enseñó que solo el amor, la paciencia y la verdad pueden construir puentes donde otros levantan muros. Asimismo, subrayó el mensaje del santo padre sobre la importancia de rechazar las divisiones y ser sembradores de paz en las familias, comunidades y en toda la sociedad.
Boluarte exhortó a los peruanos a rechazar toda forma de odio y división, recogiendo el legado del pontífice como un compromiso nacional de reconciliación y amor al prójimo. “Que nada nos separe como hermanos, que no permitamos que el odio eche raíces en nuestras mentes ni en nuestros corazones”, manifestó.
Llamado a trabajar por un Perú más digno y solidario
La presidenta convocó a todos los sectores de la sociedad a trabajar conjuntamente por la construcción de un Perú más digno, solidario y próspero, donde cada ciudadano encuentre respeto y oportunidades. Además, evocó el mensaje de esperanza del Papa Francisco, en especial sus palabras dirigidas a los jóvenes: “Ustedes, jóvenes, que quieren cambiar el mundo, no tengan miedo”.
Boluarte destacó que el Papa fue un reflejo vivo de las enseñanzas de Cristo, al resaltar la importancia de rechazar la división, la maldad y la mentira. También enfatizó que la integridad, la sinceridad y la pureza de corazón son virtudes esenciales para vivir en paz con Dios y con los demás.
Finalmente, recordó el llamado del pontífice a no perder nunca la esperanza, incluso en los momentos de mayor dificultad. “El futuro nos reclama. Es hora de levantarnos con la dignidad de nuestros ancestros y construir la patria que soñamos. Que nadie quede atrás, que nadie baje los brazos”, afirmó.
Previo a la ceremonia, la presidenta participó en una misa celebrada en la Basílica Catedral de Lima por el descanso eterno del Papa Francisco, acompañada de su Gabinete Ministerial.
