Al cierre del 2023, los piuranos gastaron de su propio bolsillo un promedio de S/ 338 por persona para atenciones médicas y compra de medicamentos, ante la ineficiencia del Sistema Nacional de Salud para brindarles de manera eficiente dichos servicios, según estimaciones de la Encuesta Nacional de Hogares (Enaho), consignadas por ComexPerú.
Si bien la cifra significó una reducción del 8.4% respecto a los S/ 369 del 2022, aún se ubica por encima de los niveles del 2019, cuando el gasto promedio de los piuranos por ambas acciones alcanzó los S/ 280 por persona.
“En todos los departamentos aumentó el gasto promedio anual por persona para adquirir medicamentos y atenciones de salud respecto al 2019. Además, casi todo el gasto de bolsillo total a nivel nacional se concentra en la población no pobre, según estimaciones del Minsa. Esto porque las personas en situación de pobreza, que están afiliadas al SIS en su mayoría, no tienen otras opciones para acceder a consultas o medicamentos por su cuenta”, advirtió ComexPerú.
A nivel nacional, el gasto de bolsillo per cápita de los peruanos por atenciones médicas y compra de medicamentos llegó a S/ 444 en el 2023, de acuerdo con las cifras de la Enaho. De ese total, cada persona destinó S/ 275 para atenciones médicas, por la falta de una cobertura efectiva de los seguros de salud, donde se reportó la mayoría del incremento respecto con 2019; y S/ 169 para la compra de medicamentos.
La cifra del 2023 fue menor a la del año anterior (S/ 455), pero continuó por encima de los niveles del 2019, cuando el gasto se ubicaba en S/ 344 por persona. En ese marco, ComexPerú puntualizó que el gasto de bolsillo acumulado por atenciones y medicamentos ascendió a S/ 63,844 millones entre 2019 y 2023.
El actual nivel de gasto es producto de la falta de medicinas en los establecimientos públicos de salud. Así, según el estudio “Situación actual del sistema de salud peruano”, elaborado por Videnza Consultores, por encargo de ComexPerú, dos de cada cinco establecimientos del primer y de segundo nivel de atención “no tienen disponibilidad de medicamentos esenciales”.
Ante esta situación, el gremio consideró que “la precariedad del sistema de aseguramiento público no debe seguir ignorándose. El incremento en el gasto de bolsillo encarece el costo de vida y aumenta la desigualdad. Esto debido a que la salud de la población de escasos recursos depende principalmente del Estado”, anotó.