Sony ha anunciado oficialmente que, a partir de febrero de 2025, dejará de fabricar Blu-ray grabables, los discos utilizados para almacenar películas, videojuegos y otros contenidos. La compañía también cesará la producción de los MiniDisc y las cintas MiniDV, que fueron populares en su momento, especialmente en filmadoras. Este movimiento marca el fin de una era para estos formatos físicos.
A través de un breve comunicado, Sony Japón informó que no habrá sucesores para estos productos. En su mensaje, la marca agradeció a sus clientes por el apoyo recibido a lo largo de los años:
«Hemos decidido interrumpir la producción de todos los modelos de soportes Blu-ray Disc, MiniDisc para grabación, MD Data para grabación y Mini DV Cassette a partir de febrero de 2025. No habrá modelos sucesores. Queremos agradecer a nuestros numerosos clientes su patrocinio.»
El fin del Blu-ray y la transición al digital
El anuncio de Sony sigue al reciente lanzamiento de la PlayStation 5 Pro, una consola que llegó sin lector de discos, permitiendo solo juegos digitales. Este movimiento había generado inquietud entre los gamers que aún prefieren los juegos físicos, pero Sony aclaró que ofrecería una lectora de discos por separado para quienes lo necesiten. Además, muchos rumores apuntaban a que esta decisión se debía al fin de la producción de discos Blu-ray, algo que la compañía acaba de confirmar.
A pesar de que Sony dejará de fabricar discos Blu-ray, continuará comercializando reproductores que puedan leer y grabar estos discos, aunque no se sabe por cuánto tiempo. Además, la compañía surcoreana LG ya había anunciado que abandonaría la fabricación de reproductores Blu-ray a finales de 2024 debido al declive de esta tecnología.
La predicción del «padre» del Blu-ray
Kees Schouhamer Immink, considerado el «padre» del Blu-ray, ya había anticipado la desaparición de este formato en 2015. En una entrevista, Immink señaló que el futuro de los medios de consumo sería el streaming y la nube, y que los discos físicos como el Blu-ray desaparecerían con el tiempo. Aunque reconoció que muchas personas seguirían eligiendo el formato físico por su preferencia personal, también apuntó que las generaciones más jóvenes no tienen la misma relación con los discos y tienden a considerar la música y las películas como elementos accesibles de manera gratuita a través de plataformas digitales.
