El huracán Milton ha aumentado su intensidad, alcanzando la categoría 4 en la escala Saffir-Simpson, con vientos sostenidos de 195 km/h, según el último informe del Centro Nacional de Huracanes (NHC). La tormenta amenaza con provocar fuertes lluvias y vientos peligrosos en las costas de México y la península de Florida.
Milton genera alerta en México
El Gobierno de México actualizó su información a las 5:00 a.m., confirmando que el huracán Milton avanzó a categoría 3 y alertó sobre la llegada de intensas lluvias y vientos a varias regiones del país. Las áreas más afectadas incluyen el noreste, oriente, sur y sureste, así como la península de Yucatán.
La Comisión Nacional del Agua (Conagua) informó que el centro del huracán se ubicó a 235 km al oeste-noroeste de Celestún. Ante esta situación, se pronosticaron lluvias muy intensas en Campeche y Yucatán, y precipitaciones fuertes en Puebla, Veracruz, Tabasco y Quintana Roo. Además, se esperan rachas de viento entre 100 y 120 km/h, y oleaje de hasta 5 metros en las costas de Campeche y Yucatán.
Recomendaciones para la población afectada
Las autoridades mexicanas instaron a la población de las zonas en riesgo a extremar precauciones por las lluvias, vientos y oleaje que se esperan en los próximos días. También se recomienda a los navegantes evitar el mar en las regiones afectadas.
Claudia Sheinbaum, presidenta de México, advirtió que las fuertes lluvias seguirán impactando el noreste y sureste del país debido a la circulación del huracán Milton. En un mensaje difundido en redes sociales, la mandataria destacó que, aunque el huracán aún está alejado de la costa, las intensas precipitaciones afectarán a Veracruz, Campeche, Tabasco y Quintana Roo.
Posible impacto en Florida
Por otro lado, el Centro Nacional de Huracanes también emitió alertas para la costa del Golfo de Florida, donde se prevé que Milton llegue el miércoles como un huracán de categoría 4, con un alto poder destructivo. La región ya está en alerta desde Chokoloskee hasta la desembocadura del río Suwanee, por la posibilidad de graves inundaciones y fuertes vientos.
Este fenómeno llega apenas diez días después de que el huracán Helene devastara el estado, siendo uno de los más mortíferos desde el huracán Katrina. Las autoridades instan a los residentes de las zonas afectadas a estar preparados para evacuaciones si las condiciones empeoran.