Tras el fallecimiento de 13 trabajadores mineros en la provincia de Pataz, el alcalde provincial de Trujillo, Mario Reyna Rodríguez, instó a las autoridades nacionales a adoptar medidas urgentes que permitan enfrentar la minería ilegal y el crimen organizado en el país.
El pronunciamiento del burgomaestre se dio luego del mensaje presidencial en el que la presidenta Dina Boluarte anunció nuevas acciones contra el crimen organizado, incluyendo la presentación de una iniciativa legislativa para incorporar la figura de terrorismo urbano en el marco legal.
Reyna respaldó esta propuesta y solicitó al Congreso su pronta aprobación. Afirmó que los hechos ocurridos en Pataz representan uno de los episodios más graves de violencia registrados en los últimos años en el norte del país. Según indicó, el debate sobre la ley debe darse de forma inmediata y, si se requieren ajustes, estos deben realizarse sin postergar su promulgación.
Preocupación por posible expansión de la violencia en Trujillo
El alcalde también expresó su preocupación por la situación en Trujillo, advirtiendo que los recientes actos de violencia registrados en la provincia podrían estar vinculados con actividades ilegales relacionadas a la minería. En ese contexto, señaló que existe el riesgo de que hechos similares a los de Pataz puedan repetirse en su jurisdicción.
Además, recordó que desde el Comité Provincial de Seguridad Ciudadana (Coprosec) se ha planteado reiteradamente la necesidad de que los delitos de extorsión y sicariato sean considerados como formas de terrorismo urbano. Esta tipificación, sostuvo, permitiría fortalecer la capacidad de respuesta del Estado frente a estas amenazas.
El alcalde también enfatizó la importancia de dotar de mayores recursos logísticos y operativos a la Policía Nacional, con el fin de enfrentar de manera más eficaz los crecientes niveles de criminalidad en la región.