La emblemática Casona San Miguel, un ícono arquitectónico de Piura y testigo de la presencia de figuras como Mario Vargas Llosa y Luis Miguel Sánchez Cerro, atraviesa un grave estado de abandono. Tras más de una década sin mantenimiento, su estructura histórica ha sido invadida por basura y utilizada como urinario público, reflejando el desinterés en su preservación.
El deterioro de un símbolo cultural
El decano del Colegio de Arquitectos de Piura, Leopoldo Villacorta, expresó su profunda preocupación ante el crítico estado de la casona. “No podemos permitir que monumentos de esta magnitud sigan deteriorándose. La Casona San Miguel representa nuestra identidad y merece ser protegida”, afirmó contundentemente.
El deterioro no solo afecta la estética y el valor histórico del edificio, sino también la seguridad de quienes transitan por la zona. Los muros presentan visibles daños estructurales, lo que hace urgente la intervención de las autoridades.
Una solución conjunta para rescatar el patrimonio
Villacorta subrayó la necesidad de elaborar un expediente técnico que permita iniciar los trabajos de restauración. Este proceso, según explicó, requiere una inversión significativa y la colaboración activa entre las autoridades locales, el gobierno regional y la comunidad.
“El objetivo no es solo preservar la Casona San Miguel, sino convertirla en un espacio cultural que honre la memoria histórica de nuestra región. También podría generar beneficios económicos como atractivo turístico, aportando al desarrollo local”, indicó Villacorta.
Además, destacó la importancia de la revitalización urbana, un enfoque integral que busca revertir el deterioro de los espacios tradicionales, promoviendo su sostenibilidad física, social y económica. Este proyecto no solo rescataría un valioso símbolo de Piura, sino que también reforzaría el tejido cultural de la región.
El futuro de la Casona San Miguel depende de acciones concretas y coordinadas. Su restauración no es solo una responsabilidad patrimonial, sino también una oportunidad para consolidar la identidad histórica de Piura y fomentar su desarrollo cultural y turístico.